lunes, 21 de septiembre de 2015

¿Oís eso?

¿Podéis oírlo?

Shhhhhh, no lo rompáis, por favor, que no quiero que desaparezca.

Silencio...

Tranquilidad...

Estabilidad emocional....

Shhhhhh....


Tras pasar un mes 24/7 completamente ajetreado, por fin puedo escribir esta entrada. Siento muchísimo la tardanza en publicarlo, pero han pasado cosas, MUCHAS COSAS.

Para empezar decir que mi padre está bien...de su primera operación. ¿Y por qué digo primera? Pues porque la cosa no solo se quedó en la glándula que le tenían que quitar. Por suerte o por desgracia, estaba en lista de espera para otra operación, pero esta vez del oído. Total, llevábamos esperando como 3 meses a que le llamaran de la operación, y no se les ocurre llamar nada más que el mismo día que le quitan los punto de la primera operación.

Ole, ole y ole...

A ver, por un lado está bien, porque cuanto antes se quitase de todo, mejor. Pero por el otro, a mi padre le dio el bajonazo del siglo. Tenían pensado irse al pueblo un par de días (que al final se fueron), pero claro, no se veía con ganas después del notición, Finalmente, como eran las ferias de mi otro pueblo, pues accedieron. ¿Y dónde me quedo yo?

Sí, donde imagináis. En Madrid. Solo. Con un encargo con más flores que La Rosaleda del Retiro (chiste fácil para los que seáis de Madrid, y si lo pilláis, os monto un templo). No estuvieron mal esos días en Madrid, me lo pasé realmente bien, pero yo quería pueblito u_u


Creo que nunca he tenido una adicción tan grande como la de este año por salir de aquí. Debe ser la pitopausia o algo de eso, que ya me está empezando a llegar. Total, dentro de 5 meses me caen 21 castañas. Sí, debe de ser eso.

Total, que hace poco le operaron y todo chachi pistachi, operación rápida y sin complicaciones. Genial todo. O nos mira un tuerto, o nos viene el niño con un pan debajo del brazo. Esto es de locos. Así estoy yo, que ya no se ni donde meterme con los altibajos emocionales. Lo mismo puedo estar feliz como un niño con un minion, como aborrecer a la humanidad y querer crear la Bomba J para autoimplosionar sobre mi persona.

Soy un caos. Esto es así. Bendita la chica que en un futuro tenga que aguantar a semejante bigardo deshormonizado. Santa paciencia, zeñó...Pero eso me lo guardo para otra entrada, que me acaba de venir un flús :3

Total, pasa la operación, se van al pueblo, entrego la tarta de las flores, que si no la habéis visto, está en Instagram (tenéis el enlace tanto arriba como en la barra lateral), y cuando parece que llega la tranquilidad, otro mamporro de realidad :D


Hace poco fue la VFNO y todos los años la Joyería Yanes organiza pues eso, un evento donde asiste la gente y se ponen como el kiko. En fin, que a mi padre le tocaba ser el segurata para que no entrara gente que no llevase invitación o similar. ¿Y a quién le ha tocado este año? Al menda lerenda.

Camisita, americana, corbata, unos pitis y unas zapas hipsters y a correr. No se me coló nadie, menos mal. Lo que me gustó fue los piropos que recibí a lo largo de la noche, preguntando que si era yo, que si que guapo estaba... Lo mas gracioso fue que la mayoría de gente del edificio, ¡casi ni me reconoce! Emm, vale que cambie vestido con traje, pero de ahí a ni siquiera saber quién era, algo falla, señora ;)

No es que fuese un trabajo muy duro, la verdad, pero me puso de muy mala baba todo el pijerío reunido en un mismo sitio. El cúlmen de la noche fueron las amigas ultrapijas de uno de los que organizaban la fiesta, que por sus santos...ovarios, tenían que pasar sí o sí, sin invitación, sin pulserita y sin nada, porque sólo iban a saludar. Se pusieron tercas, llamaron al susodicho en cuestión y os juro que no he tenido más ganas en mi vida de reventarle la cara contra el suelo a alguien. Si no fuese porque mis emociones estaban en stand by, las habría matado allí mismo :)

No pensemos mal, que no soy tan violento, es solo una forma de hablar. Y al que diga lo contrario me lo cargo.


Hablando de estabilidades psiquiátricas emocionales, tengo más altibajos que el 7 Picos del Parque de Atracciones (en paz descanse). Como he dicho más arriba, soy el caos emocional personificado, o al menos lo fui durante estos últimos días. No sabía si subirme por las paredes o directamente esconderme en el primer hueco que encontrase. El problema de mis altibajos emocionales es que acaba siempre en el mismo sitio: COMIENDO.

Y mucho.

Lo que sea.

Ansiedad, lo llaman. Yo lo llamo gula emocionan insatisfactoria. Cualquier cosa que sea comestible, me la como. Así estaba, que por mucho que fuese al gimnasio el poco tiempo que comía, no me servía absolutamente de nada. Bueno, algo haría, pero no lo que debería de hacer si me tiro dos horas ahí metido.

En definitiva, que yo estaba como un gremlin cuando le echan agua. Si me pillas bien, te respondo bien. Si me pillas ofuscado, te mato :) Y si me pillas en un evento de alta categoría y me tocas mucho los pelendengues, pues me callo, me meto en mi cueva y te hago vudú para que se te caigan las extensiones :D


Así que ahora que ha llegado la calma de una manera particular y extrañamente fuere de lo común, no quiero que absolutamente nadie, NADIE, me perturbe esa calma y tranquilidad porque, en el momento al que alguien se le ocurre invocar al poder de un tuerto, una gitana con los romeros y a Sandro Rey, yo que vosotros saldría corriendo, o directamente me mudaría de país.

Yo solo aviso que todo el estrés acumulado, que en mi caso suele salir a flote cuando llegan períodos de tranquilidad (ahora estoy escribiendo esto con un tic en el párpado, así que imaginaros), explotará creando una dualidad maligna de mi mismo, con la que podría desatar el poder de todas las criaturas del averno en un solo ser, arrasando a todo lo que se cruce de por medio. Y nada podrá detenerme :)


Me está dando por poner gifs en los post, muchos, pero es que me encantan *___*

En fin, que mientras el caos se va preparando, yo mientras voy a dejaros con esto que tenéis más abajo...


Si no estáis babeando, es que no tenéis perdón de dios. Y si ya lo estábais haciendo desde el comienzo de este post, pues me subís un poquito la mora.

Y ya sí que sí, vamos con la receta!

Chocolate Guinness Layer Cake con Frosting de Mascarpone, Caramelo Salado e Higos
Para el bizcocho:
  • 375 ml de cerveza negra Guinness
  • 375 gr de mantequilla
  • 420 gr de harina
  • 105 gr de cacao en polvo sin azúcar
  • 600 gr de azúcar
  • 210 gr de sour cream o crema agria
  • 3 huevos
  • 1 cucharada de vainilla
  • 1 cucharadita de levadura química
Para la crema:
  • 500 gr de queso mascarpone
  • 500 ml de nata para montar 35% M.G.
  • 200 gr de azúcar glass
Para el caramelo salado:
  • 200 gr de azúcar
  • 50 ml de agua
  • 200 ml de nata para montar 35% M.G
  • 50 gr de mantequilla
  • Sal maldon
Para decorar:
  • Higos frescos de vuestra preferencia
  • Nueces

Primero, precalentamos el horno a 170ºC. Preparamos 4 moldes de 18 cm de diámetro con papel de horno, mantequilla, harina, como más rabia os de.
En un cazo, ponemos la cerveza y la mantequilla, y lo llevamos al fuego hasta que se funda por completo. Dejamos entibiar, y añadimos los huevos, la crema agria y la vainilla. Incorporamos el azúcar y mezclamos. Por último, tamizamos la harina, el cacao y la levadura, y lo mezclamos todo muy bien. Repartimos la masa entre los moldes, y llevamos al horno, durante unos 30 minutos aproximadamente. Para comprobar que están hechos, pinchamos con un palillo en el centro, y si sale limpio, están listos.
Sacamos del horno y dejamos enfriar, primero en el molde, y luego en una rejilla para que se enfríen completamente. Reservamos.

Para la crema, ponemos el queso con el azúcar glas en el bol de la batidora, y batimos a velocidad media hasta incorporar. Aumentamos la velocidad, y vamos echando la nata a chorro grueso, hasta que monte y esté completamente dura. Reservamos en la nevera.

Para el caramelo salado, calentamos la nata en el micro hasta que esté bien caliente. Reservamos. Ponemos en un cazo profundo el azúcar con el agua. A fuego medio, esperamos, con mucho cuidado de que no se nos queme, hasta que coja un tono rubio tirando a moreno, añadimos la nada caliente sin dejar de remover, y con mucho cuidado por favor, que suelta mucho vapor y salta. Retiramos del fuego y añadimos la mantequilla, mezclamos bien, y reservamos para que se enfríe. Echamos sal maldon al gusto, hasta tener un contraste rico entre salado y dulce :)

Para el montaje, nivelamos los bizcochos o bien con cuchillo, o con una lira. Vamos superponiendo capas de bizcocho con camas de crema. Yo la metí en una manga y así pude controlar todas las cantidades por igual. Cuando ya la tengamos, cubrimos la tarta con una capa sujetamigas o crumb coat, y finalmente, la cubrimos entera. Yo al decore usando una cuchara, empezando desde abajo y subiendo, creando surcos.
Para rematar, cortamos unos cuantos higos a la mitad y reservamos. Cogemos las nueces, algo picadas, y las disponemos alrededor de la tarta. Ponemos los higos en el centro, que queden bonitos y colocados, y por último, regamos con el caramelo salado. No sus cortéis en este paso y regarla bien ;D

Y a disfrutar!




La tarta se conserva en la nevera alrededor de 4-5 días sin ningún problema. Esta jugosa pero a la vez tiene una miga algo densa, que combina perfectamente con la crema de queso, y los higos y el caramelo ya la rematan del todo para hacerla lo más espectacular posible.

En casa triunfó, y lo dicho, en 4 días no quedaban ni las migas :D

En fin, señoras y señores, aprovechad los últimos higos de la temporada, aunque la podéis acompañar con otras frutas, las que más os gusten! Ya sabéis que el chocolate y el queso combinan con todo perfectamente. Y en una tarta, aún mas :)

Espero que os haya gustado esta nueva receta y que la probéis en casa, que seguro que no os defrauda. Daros las gracias por seguir ahí, aunque publique de higos a brevas, que hoy me viene al pelo, y por los comentarios y por todo en general.

Se os quiere.

Un besote enorme y un abrazo inmenso!

Muaks!

Jesús